miércoles, 9 de enero de 2008

Homenaje a Emilio Lacambra

Ayer Horeca Zaragoza (Asociaciones de Hoteles y Restaurantes de Zaragoza, unidos para la ocasión) celebró una comida para rendir un pequeño y merecido homenaje (aunque todos los miembros del comité ejecutivo coincidimos que un pelín tardío) a este hombre que ha sido el alma-mater del asociacionismo de la hostelería zaragozana.

Emilio recibió en este acto la insignia de oro de Horeca y su nombramiento como Presidente de Honor, aunque estoy seguro que, para él, lo mejor fue reunirnos a antiguos compañeros y nueva gente de la hostelería (como yo) en un agradable encuentro de charla y entrañables recuerdos para sus ex-compañeros. Estuvimos muy bien atendidos en Eliseos (con nueva y joven gerencia y con el modelo bar de copas-restaurante, tan de moda en Zaragoza)

Como ya se dijo ayer sus principales logros: la creación de las escuelas de hostelería de Aragón, los lazos con compañeros de otras ciudades españolas y francesas, y tantas y tantas cosas.

Pero más allá de sus más de 20 años de dedicación al gremio (entre Presidencia de Restaurantes y de la Federación Horeca) me gustaría destacarle por los orígenes de Horeca Zaragoza. Reseñar, gracias a todo lo que me ha contado Luis Vaquer padre (otro de los "aquellos locos de los comienzos") cómo se creó Horeca.

Veo a Emilio, a Luis mi padre, a Faustino, y a tantos otros como en un episodio del "Cuéntame" y me imagino lo difícil que fue crear una Asociación empresarial que sería regida por un "rojeras" como Emilio, sin dinero (el gobierno estaba "canino" para subvencionar), sin personal , contra un "establishment" empresarial y político que provenía de una dictadura, en aquellos tiempos convulsos y en una España en crisis económica.

En estos tiempos de la Expo2008, de la globalización (con nuestros clientes y trabajadores extranjeros), de internet, de la prosperidad económica, de las libertades consolidadas, etc. es bueno de vez en cuando pensar en cómo empezó aquello y seguir adelante con ilusión tras esta mirada entrañable al pasado.

2 comentarios:

Caesar dijo...

Emilio un tipo entrañable y cercano. Un hostelero de tradición con un olfato comunicativo impresionante. Deberían sentarlo en algun consejo se veteranos y sabios para que este Aragón, y en concreto Zaragoza, funcionaran como es debido. Un muy merecido homenaje.

Caesar dijo...

Emilio un tipo entrañable y cercano. Un hostelero de tradición con un olfato comunicativo impresionante. Deberían sentarlo en algun consejo se veteranos y sabios para que este Aragón, y en concreto Zaragoza, funcionaran como es debido. Un muy merecido homenaje.